La llegada de un nuevo año siempre trae consigo expectativas, metas y cambios. Y no es para menos, porque se cumple el primer cuarto del siglo XXI. Pero este 2025 marca además un hito especial: el inicio de la Generación Beta.
Esta generación, formada por los descendientes de los millennials y la generación Z, se extenderá hasta 2039 y ya está despertando interés en sectores clave de la sociedad, como el inmobiliario.
En este artículo, exploraremos cómo la industria inmobiliaria debe prepararse para adaptarse a las necesidades de este grupo y qué podemos aprender de las generaciones anteriores.
Antes de adentrarnos en las particularidades de la Generación Beta, es fundamental entender cómo las generaciones previas han influido en el mercado inmobiliario.
Cada generación ha dejado una huella distinta en el mercado. La Generación Beta, con su inevitable influencia de un mundo hiperconectado y tecnológico, promete seguir esta tendencia.
La Generación Beta crecerá en un mundo donde la tecnología y la inteligencia artificial (IA) serán omnipresentes. Esto va a influir profundamente en su forma de consumir, su forma de vivir y sus expectativas de vida, ya que se prevé que vivan hasta el siglo XXII.
Algunas de sus principales características serán:
En el mercado chileno actual, los millennials y gen Z capturan el 83,7% de solicitudes de créditos hipotecarios.
Los millennials (28 a 43 años) lideran las solicitudes, representando el 64,5% durante el último trimestre, al mismo tiempo que las aprobaciones, alcanzando un 36,9%. Por su parte, los gen Z o centennials (hasta 27 años) generan el 19,2% de las solicitudes de preaprobación, con un índice de aceptación del 29,4%.
La generación X (44 a 59 años) representa el 14,6% de los solicitantes, logrando una tasa de financiamiento aprobada del 26,3%.
Chile, que enfrenta un exceso de stock de viviendas, tiene al frente un desafío que podría transformarse en oportunidad si los desarrolladores adoptan estrategias centradas en las nuevas generaciones.
La IA no solo será parte de la vida diaria de la Generación Beta, sino también una herramienta esencial para el sector inmobiliario. ¿Cómo puede transformar la industria?
La Generación Beta plantea un desafío emocionante: transformar la manera en que diseñamos, construimos y vendemos viviendas. Adaptarse no es una opción, sino una necesidad. Las empresas que integren tecnologías avanzadas, promuevan la sostenibilidad y prioricen las experiencias personalizadas estarán mejor posicionadas para liderar el mercado.
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